Hace unos meses, en la mente de Hasbleydy, una joven de 28 años de La Estrella, Antioquia, solo había una prioridad: llevar a feliz término su embarazo para conocer a sus gemelas, María José y María Victoria. Aunque todo estaba previsto para tener su parto en Medellín, diferentes circunstancias la llevaron a la Clínica Somer en Rionegro.
El 7 de noviembre de 2024, el anhelo de conocer a sus pequeñas se cumplió, aunque la felicidad no fue completa, pues una de ellas quedó hospitalizada en la UCI Neonatal.
Cada día, Hasbleydy venía a visitar y alimentar a su pequeña. Durante este proceso, comenzaron a manifestarse síntomas como cansancio, hinchazón y dificultad respiratoria, que la llevaron a quedar hospitalizada, gravemente enferma, en la UCI de la misma institución.
La joven mamá fue diagnosticada con cardiomiopatía periparto, una enfermedad que puede presentarse en mujeres después del parto y que afecta a una de cada mil mujeres. Hasbleydy estuvo hospitalizada y con seguimiento en nuestro Centro Cardiovascular, mientras se continuaban los estudios y se trataba el diagnóstico con medicamentos y cirugía, pero esto no fue suficiente: ella necesitaba un nuevo corazón.
Hasbleydy y su familia cuentan cómo todo se desmoronó, pero nunca perdieron la fe y la esperanza. También narran con emoción el día que llegó la noticia del corazón, y con ella las posibilidades de ver crecer a sus pequeñas. Aunque no ha sido fácil el proceso, pues ha tenido que superar muchos obstáculos, hoy, con una mirada serena y rodeada por el amor de su familia, califica lo sucedido como un milagro.
“Nosotros solo podemos agradecer por la bondad de aquella familia, por quien todos los días oramos y pedimos paz”, menciona su padre, Floresmiro Rozo, mientras ve a su hija con orgullo.
Hasbleydy se convirtió en nuestra tercera paciente trasplantada de corazón y nosotros estamos orgullosos de su valentía. Hoy le agradecemos por permitirnos contar su historia y, a través de ella, dar a conocer la esperanza que ofrece la donación de órganos.