- El trasplante de corazón es uno de los procedimientos quirúrgicos más complejos en la medicina, y su realización requiere de un gran despliegue operativo.
- En Colombia, más de 4.000 personas esperan un trasplante, de las cuales más de 20 requieren un corazón.
- Hace unos meses, el Centro Cardiovascular Somer Incare fue certificado por la Secretaría de Salud de Antioquia para realizar trasplantes de corazón, convirtiéndose en la segunda institución del departamento habilitada para llevar a cabo este complejo procedimiento.
En noviembre de 2024, nuestro Centro Cardiovascular Somer Incare realizó el primer trasplante de corazón en el Oriente Antioqueño, un hito para Antioquia y la subregión. En meses recientes, nos convertimos en la segunda institución en Antioquia habilitada para realizar trasplantes de corazón.
La noticia de la disponibilidad de un nuevo corazón fue recibida por Carlos Badavid Madrid, un hombre de 60 años de Medellín, quien sufría una falla cardíaca de origen isquémico, es decir, una obstrucción de las arterias coronarias, que lo llevó a presentar varios infartos en su vida, siendo el trasplante la única alternativa de tratamiento.
“El Centro Cardiovascular Somer Incare, ya había realizado varios rescates de corazones en distintas partes del país para ser trasladados a sus respectivos receptores, pero la realización del trasplante de este órgano marcó un punto importante en el recorrido de nuestra Institución y de la Clínica Somer. Este avance acercará las posibilidades de vida a muchos pacientes”, comentó la Dra. Catalina Gallego, cardióloga especialista en falla cardíaca avanzada y líder clínica del Programa de trasplante de corazón de Somer Incare.
El trasplante cardíaco requiere de un gran despliegue logístico y operativo. Este procedimiento es llevado a cabo por un equipo multidisciplinario, que incluye cirujanos cardiovasculares especializados en trasplantes, cardiólogos especialistas en falla cardíaca avanzada, anestesiólogos cardiovasculares, instrumentadores quirúrgicos, personal de enfermería, coordinador de trasplantes, entre otros, quienes trabajan de manera articulada para lograr el éxito de la cirugía. Posteriormente, el paciente pasa a una unidad de cuidados intensivos y luego a una unidad de cuidado coronario, donde se realiza un seguimiento detallado y constante de su evolución, para después iniciar la etapa de rehabilitación.
En Antioquia existen solo tres instituciones habilitadas para realizar trasplantes de corazón, y a nivel nacional, solo hay diez, debido a la alta complejidad que requiere este procedimiento. Cada año, en Colombia se llevan a cabo en promedio 80 trasplantes de corazón, según cifras del Instituto Nacional de Salud. A la fecha de redacción de este comunicado, 21 personas están en lista de espera para un trasplante cardíaco en el país.
El Dr. Rafael Meza Jiménez, cirujano cardiovascular y líder quirúrgico del Programa de trasplante de corazón, expresó: “Este es un momento histórico para la medicina de Antioquia y de Colombia, ya que ofrecerá esperanza a los pacientes con insuficiencia cardíaca avanzada, una cifra que sigue aumentando en el país. Cabe destacar que este trasplante es la cirugía cardiovascular más compleja que existe, por lo que nos llena de emoción poder llevarlo a cabo en nuestro Centro”.
Es importante destacar que el trasplante de corazón se realiza en conjunto con la Clínica Somer, que también realiza trasplantes de riñón, hígado, páncreas, tejidos y médula ósea, lo que garantiza la integralidad en estos procedimientos.
“La salud de Carlos está evolucionando positivamente. Aún está hospitalizado, pues es necesario seguir monitoreando que no haya rechazo del nuevo corazón. Estamos trabajando para que pueda rehabilitarse y retomar una vida productiva. Seguimos cuidadosamente todos los protocolos necesarios para uno de los procedimientos más complejos de la medicina”, concluyó la Dra. Catalina Gallego.
El Centro Cardiovascular Somer Incare, en alianza con la Clínica Somer, espera seguir ofreciendo la posibilidad de trasplantes a muchas personas, con todo el rigor científico para garantizar los mejores resultados en salud. Además agradecen a la familia de los donantes, quienes permiten que se pueda dar vida después de la vida